En Realidad ser un trabajador Freelance no es dificil si eres una persona que sabe administrar tu tiempo, eres dedicado y tienes un buen autocontrol
1 – Tendrás que hacer frente a todos los gastos solo
Cualquier emprendimiento necesita, además de los recursos no materiales, un capital para poder solventarse. Todos estos gastos correrán por tu cuenta y tendrás que hacerles frente si no quieres que el negocio fracase.
2 – No tienes control de tu economía
¿Todo lo que tienes lo gastas? El carecer de autocontrol en las finanzas es un problema, y en muchos casos más aún para un autónomo. Si tienes esa filosofía, llevarás tu emprendimiento directo a la quiebra.
3 – Te gustan los horarios fijos
Los horarios fijos y estructurados no son cosa de freelancers. Si lo tuyo es marcar de 9 a 5 considera un trabajo normal, porque en este rubro a menudo tendrás que pasar muchísimas horas trabajando y en otros momentos la actividad puede estar bastante quieta.
4 – Te gusta el trabajo en equipo
La mayoría de las veces, se trabaja solo. De todas maneras, esta situación ya fue pensada y resuelta, por lo que muchos freelancers optan por alquilar oficinas compartidas, un sistema que está en auge y se conoce como Coworking.
5 – Eres indisciplinado
Si te cuesta levantarte temprano, te da pánico tomar tus propias decisiones, necesitas de un jefe que te ordene las tareas y respalde tu trabajo y no eres una persona responsable, el trabajo como freelance puede convertirse en una pesadilla cuando descubras que no has realizado tus actividades pendientes.
6 – Emprendiste este camino porque no te gustaba tu trabajo
Razones como “no me gusta lo que hago” son muy válidas para buscar un camino distinto y dar un giro en tu carrera, pero no es una razón suficiente para dejar un trabajo estable y comenzar uno por cuenta propia.
7 – No sabes ponerle precio a tu trabajo
Para esto debes perder la vergüenza que puedes experimentar al ponerle precio a tu tarea y debes tener en claro las reglas del mercado.
